La Dolorosa vestida para la procesión del Viernes Santo
© Carlos Crismatt Mouthon
Lunes 5 de abril de 1999
SEMANA SANTA
Pasión Orense
Ciénaga de Oro le siguió los pasos a la muerte de Jesús
Tradición 'vestida' de fe
Por Carlos A. Pulgarín
Enviado Especial de Tiempo Caribe
Ciénaga de Oro (Córdoba)
La primera procesión hizo su recorrido un Jueves Santo de 1857, cuando fueron expuestas imágenes religiosas de gran valor artístico que se trajeron del exterior.
a calle está atiborrada de gente. De pronto suena una campana y todos se abren a lado y lado de la vía. De inmediato, en la oscuridad, aparece una procesión de nazarenos que cargan los monumentos o imágenes religiosas especialmente ataviadas para la ocasión-
Este es el fervor religioso que caracteriza la celebración centenaria de la Semana Santa en Ciénaga de Oro, pintoresco municipio del bajo Sinú, en Córdoba. Sus pobladores muestran un sincretismo cargado de tradición y fe, mezcla que para algunas autoridades religiosas no deja de ser una fecha comercial y casi que pagana.
Desde hace 146 años, Ciénaga de Oro comenzó a realizar estas actividades religiosas que representan la pasión y muerte de Jesús. Lo más atractivo para los turistas es la belleza de sus imágenes religiosas, elaboradas por manos de artistas de los siglos XVIII y XIX.
La abogada y estudiosa del tema, Edma Cristina Louis, recuerda que las referencias históricas muestran que la primera procesión hizo su recorrido un Jueves Santo de 1857, cuando fueron expuestas la imágenes religiosas de gran valor artístico que se trajeron del exterior.
Pero para los orenses, gentilicio con que se le conoce a los pobladores de este municipìo, lo más importante es participar de los actos religiosos con fe. "Como no, hombre, aquí hay personas que han recibido milagros y por eso el Jueves Santo se convierten en penitentes que se arrastran durante la procesión, con la intención de pagar el favor recibido", dice Oberto Manuel Santana Vidal, quien dirige la "Hermandad de los Nazarenos".
Los actos centrales, que congregan una romería de creyentes, se presentan el Jueves y el Viernes Santo. El Jueves, después de participar de la misa que conmemora la cena del Señor, a las 8:00 de la noche se inicia la "Procesión de los judíos", adornada con flores rojas.
Desde muy temprano pobladores y visitantes se ubican a lado y lado de la calle por donde se realiza el recorrido. Al caer la noche, en medio de cirios y faroles, aparece la "Procesión de los judíos". El desfile está integrado por los siguientes pasos o monumentos: "Jesús Nazareno con los judíos", "La Cruz de Caravaca", "El ángel y la muerte", "La cena", "El Señor del huerto", "El Señor de la columna", "El Señor caído", "La Verónica", "La Magdalena", "San Juan" y "La Dolorosa".
Durante el recorrido se escucha una marcha triste titulada "La ceguedad" que interpreta una banda pelayera de la zona. Los nazarenos avanzan cinco pasos y retroceden tres. Según los estudiosos del tema, esta tradición es similar a la de los actos de Sevilla, en España, y Popayán y Mompós, en Colombia.
En la procesión intervienen la Hermandad de los Nazarenos, Cofradías y Cargueros. También participan personajes muy singulares que preparan su actuación durante todo el año, entre ellos se distinguen: el pregonero romano, turiferarios o incensarieros, campanero y paje, samaritana, gestas, niños que representan la pasión, mujeres piadosas y cierran el desfile los penitentes.
Los penitentes de Ciénaga de Oro en sus inicios adoptaron una posición similar a la de los controvertidos creyentes de Santo Tomás (Atlántico), que se flagelan durante el recorrido; sin embargo, con el avance del tiempo y después de las críticas de la iglesia, las cosas cambiaron; hoy participan sin azotarse, pero con un avance singular, pues no lo hacen caminando sino arrastrando sus cuerpos por el suelo. La procesión, que se inicia a las 8:00 de la noche, termina entrada la madrugada del viernes.
El Viernes Santo, luego de asistir a los diferentes actos litúrgicos, la atención se centra en la procesión del "Entierro de Cristo". La imagen titular de este recorrido es "El Cristo yacente del sepulcro" que culmina su recorrido hacia las dos de la madrugada del sábado. La marcha, interpretada por la banda, se titula "El santo sepulcro".
Las melodías de las marchas que se escuchan durante las procesiones fueron compuestas por el maestro José María Fortunato Sáenz, más conocido como "El negro!, impulsor de este género en toda la Costa Caribe.
Para el alcalde de Ciénaga de Oro, Óscar Louis Lakah, la Semana Santa que se celebra en este municipio es un acto de fe, una convocatoria a la paz y a la reconciliación. "Queremos dar ejemplo a los colombianos de que somos tierra de paz, habitada por católicos comprometidos con el progreso", afirma.
Para los días de Semana Santa, Ciénaga de Oro se convierte en uno de los sitios más apetecidos por los turistas y los católicos practicantes. En esta oportunidad el alcalde Louis Lakah extendió invitación especial al gobernador de La Guajira, Álvaro Cuello Blanchar; y el director del Corpes Costa Atlántica, José Antonio Majarrés, quienes estuvieron presentes en los principales actos religiosos.
Y mientras unos celebraron con fervor religioso e impregnados de fe, otros aprovecharon la temporada para degustar exóticos platos de especies en vía de extinción como la hicotea, comer dulces y consumir alcohol. Para el sacerdote Nicolás Gaviria, párroco municipal, la población está dividida entre el recogimiento y la reflexión y la fiesta pagana.