Ira infame
Remite vulgaridad desde París
Joven aficionado al teatro y a la poesía
Vanidoso de su suerte viajera
envía postales donde brilla el odio
como una perla enferma
Yo lo quisiera con ese odio volcado
sobre el papel del poema
Despreciando a un mundo que lo ama
Enseñándole humildad a su alma altanera
Yo lo quisiera llorando en el escenario
No así pequeña bestia de rencor
deletreando espumarajos
Yo lo quisiera silencioso y tranquilo
Pero la Ira tiembla en sus entrañas
Ira de ceguera y soberbia Ira de sentirse poco
Ira de desleírse como una fruta podrida
Ira torpe del que padece una locura
que no es de su medida